Una migrante hondureña acompañada de una niña llora después de que miembros de la policía retuvieran la caravana para devolver a decenas de migrantes haca la frontera con Honduras, en Morales (Guatemala). EFE/ Esteban Biba/Archivo

Tegucigalpa / Guatemala/EE. UU. – El involucramiento de agentes de migración de Estados Unidos en repatriar a migrantes hondureños desde Guatemala abre una fase poco visible en torno a la realidad de los indocumentados y las realidades que les merodean.

Agentes de migración de EE. UU. Colaboraron, al margen de sus atribuciones, en retornar desde Guatemala a migrantes hondureños que viajaban hacia el norte en una caravana.

Se trata de agentes de la policía de fronteras de EE. UU. que, en enero, estaban en Guatemala donde participaban en ejercicios de entrenamiento y colaboración, pero se involucraron en un operativo para detener a los migrantes hondureños y devolverlos a su país. Toda su actuación ocurrió al margen de sus atribuciones.

Ello se adelantó en un reporte de trabajo del Senado de EE UU, que fue divulgado por reputados medios de la prensa estadounidense e internacional.

La información trasciende en momentos cruciales de cara a la elección presidencial en los Estados Unidos.

Senadores demócratas exigen una investigación en Washington, en tanto Guatemala también anunció una pesquisa sobre el asunto.

De su lado Honduras dijo desconocer la situación de que migrantes hondureños fueron detenidos en Guatemala y deportados al país en camionetas alquiladas por agentes de la Oficina de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés).

La vicecanciller hondureña, Nelly Jerez, dijo a Proceso Digital que no estaban al tanto de los hechos e indicó que es un asunto que compete a Guatemala y Estados Unidos y que son respetuosos de dichas jurisdicciones.

Proceso Digital también contactó a la jefatura de comunicaciones del Instituto Nacional de Migración de Honduras quien refirió que es un tema que corresponde a autoridades de Guatemala.

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Archivo / EFE.

Honduras desconoce operativo

Los hechos habrían ocurrido con migrantes de la primera caravana migrante del 2020 que salió de la ciudad de San Pedro Sula el 15 de enero pasado.

“No tenemos ningún conocimiento sobre ese tema”, arguyó la funcionaria hondureña.

Jerez dijo que tampoco pueden consultar a Guatemala sobre dichos operativos, ya que se trata de sus relaciones bilaterales entre el país centroamericano y EE. UU.

“Nosotros no nos podemos meter en relaciones bilaterales… las relaciones bilaterales son propias de los dos países”, cerró.

Informe

En el entorno, los demócratas denunciaron una operación migratoria irregular por parte de funcionarios de la Administración del presidente Donald Trump en Guatemala, en la que transportaron sin autorización a mujeres y niños migrantes a la frontera con Honduras.

Al respecto, el informe de los demócratas del Comité de Relaciones Exteriores del Senado de EE. UU., liderados por el legislador Bob Menéndez, establece que miembros del Departamento de Seguridad Nacional (DHS, en inglés) «malversaron fondos del Departamento de Estado de EE. UU. para llevar a cabo una operación no autorizada»

En concreto, el texto describe cómo miembros de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, en inglés) destacados en Guatemala transportaron a migrantes hondureños en furgonetas sin identificación para reubicarlos en la frontera entre ambos países.

La Policía guatemalteca y los funcionarios estadounidenses, vestidos de civil con camisa de botones, lentes oscuros y pantalones de comando, revisaron a decenas de hondureños, retuvieron a varios de ellos a la altura de la aldea Entre Ríos, del departamento de Izabal (este), y los devolvieron en microbuses hacia la frontera de El Corinto, desde donde habían ingresado como caravana para que se registraran, revela el informe del Senado estadounidense.

Tras la publicación del documento, Menéndez consideró en un comunicado que “el Departamento de Seguridad Nacional y la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza no están autorizados para actuar como policía migratoria a través de Latinoamérica. El Congreso debe intervenir una vez más para controlar la trastornada agenda antiinmigrante de este presidente”.

Guatemala analizará hechos

La secretaria de Comunicación Social de la Presidencia guatemalteca, Francis Masek, aseguró a periodistas que el Gobierno realizará el análisis de los hechos, en conjunto con otras instituciones “correspondientes”, para “tener mayor claridad de algunos detalles mencionados en el reporte que supuestamente ocurrieron un día después (15 de enero) de la toma de posesión del nuevo Gobierno”.

“Es importante hacer énfasis en que dicho informe se centra en lo relativo a acuerdos entre instituciones estadounidenses”, destacó la funcionaria guatemalteca.

Acotó que el documento “hace referencia a que los supuestos hechos se desarrollaron en territorio guatemalteco, el informe hace referencia a normativas internas y asuntos propios entre las instituciones y agencias del Gobierno de los EE. UU., asunto sobre el que no nos corresponde (al Gobierno de Guatemala) emitir opinión”.

“Informe confirma lo que se sabía”

El informe ha despertado diferentes reacciones entre los defensores de derechos humanos quienes concluyen que confirma algo que, según sus opiniones, ya se sabía.

Proceso Digital consultó sobre el tema a la coordinadora de la Red Jesuita con Migrantes en Honduras, Karla Rivas, quien apuntó que “el informe confirma lo que se había visto en enero”.

Incluso señaló que colaboradores denunciaron en su momento la presencia de “gringos” en Guatemala, pero no entendía lo que sucedía y llegaron a creer que quizás se trataba de una coincidencia de una capacitación.

“Nos preocupa porque ya lo habíamos visto pero no de una manera tan descarada y que lo aceptaran públicamente por parte del gobierno de Estados Unidos que sí están como en los viejos tiempos, paseándose por Centroamérica”, apostilló la defensora de derechos humanos. (RO)